
Seminario de psicopatología. Clínica diferencial en el Hombre de los Lobos
A cargo de: Rodrigo Bilbao
Fechas:
- 15 diciembre
- 12 enero
- 9 febrero
- 8 marzo
- 12 abril
- 10 mayo
- 8 junio
Horario: de 13:ooh-14:30h
Precio: 150€ socios / 300€ no socios
En el recorrido de sus casos clínicos Freud comienza dando cuenta de la Histeria a partir de su funcionamiento, defensas y dinámicas, Ana O. (1893) y Dora (1901) serán los casos emblemáticos; luego será el turno de la Fobia con el pequeño Hans (1909); continuará más tarde con la Neurosis Obsesiva del Hombre de las Ratas (1909); presentando en 1911 -Sobre un caso de paranoia descrito autobio-gráficamente (Caso Schreber)- el funcionamiento psicótico.
Pasarán siete años para publicar uno de sus casos más emblemáticos y completos, el caso del Hombre de los Lobos (1918).
Si Freud comienza con la neurosis histérica, para luego trabajar la fobia, más tarde la neurosis obsesiva, y por último nos muestra la psicosis con Schreber, ¿de qué nos está hablando en 1918?
Se plantea como una neurosis obsesiva infantil; otros lo leen como una estructura psicótica; y ha dado pie para entender un estado límite de la personalidad. Quizás es debido al descubrimiento fundamental que sorprende a Freud, lo que permite una especulación tan variada. Nos referimos a la escena primaria, fenómeno fundante de una lógica estructural, que resignificará
todas las lecturas de sus casos anteriores. Desde este momento se insistirá en elementos estructurantes de la subjetividad, los cuales se ponen en juego a lo largo del desarrollo, tomando punto culmine en el Complejo de Edipo.
Habría que pensar qué está en juego cuando la escena primaria no opera completamente, al parecer para Freud el Hombre de los Lobos es algo distinto a Schreber; lo intentó mostrar como una Neurosis Obsesiva infantil, pero no funciona de la misma manera que el Hombre de las Ratas.
Este caso emblemático en la literatura psicoanalítica es quizás el caso más documentado en la historia de la clínica en general y el psicoanálisis en particular. Contamos con: el reporte de Freud (1918), el reporte de su segunda analista Ruth Mack Brunswick (1928), las memorias del propio Hombre de los lobos y por último el reporte de las conversaciones de Muriel Gardiner con él entre 1938 y 1956. Esta rica bibliografía nos ofrece una lectura única de un caso, su historia, sus devenires posteriores y una reflexión clínica magnífica en el campo del psicoanálisis y las psicoterapias en general.
El presente seminario buscará leer los entretelones de este maravillosos caso, sus diferentes lecturas, como también sus dificultades clínicas y psicopatológicas, que en la actualidad se ven reflejadas en lo que se llamó el paciente contemporáneo.